martes, 8 de abril de 2008

Palabras

Hoy he leído algo que me ha inspirado, he sentido que las palabras por fin volvían a tener algo más que significado; éstas regalaban sensaciones. Durante un rato sólo he querido seguir leyendo, pero como siempre he terminado despistándome de lo que de verdad me importaba; y es que es tan grande la costumbre de no atender a sólo una cosa, que mi mente en la estúpida inercia que la posee, va de salto en salto buscando tareas inacabadas, y da igual que deban ser resueltas o no, terminan contagiándome por completo, y el centro es el cómo o el cuánto y no el qué... qué triste es perderse tantas cosas sin comprender por qué, sin realmente saber si estuvo en nuestra mano la posibilidad de disfrutarlo, cómo hubiera sido... ¿Aún me espera alguien que me devuelva a las noches en las que no hago más que navegar por la cama sin conseguir apagar la mente, pero a la vez agradeciendo no conseguirlo? ¡Y es que es tan maravilloso estar imaginando situaciones perfectas que te dieran los momentos de felicidad que el corazón ansía! Hoy he podido pararme a disfrutar de leer, y debo decir que lo he hecho, he vuelto a mirar hacia donde guardo aquello que para mi realmente importa, y no quiero olvidarme de que sólo cuidando de mi "aire", valdrá la pena ser feliz arrastrado por la inercia cotidiana.

4 comentarios:

Auto Sabio dijo...

diamantito de cordoba !!!

mare mia.. asistamos al nacimiento de un gran pensador.

ahora en serio!!! m ha gustado mucho en serio. pero q mucho...
m alegro mucho q t hayas decidido por mostrarnos una parte d ti q creo, no nos muestras a menudo y q aun está algo oscura hasta para tus mas allegados.

gran destreza con las teclas amigo, gran pericia!

Phantom dijo...

Vaya, parece que Wilfred tiene algunos ases en la manga que no conocía!

Disfruta de aquellos momentos que te hagan sentirte tú mismo y no sólo de los que te obligas a disfrutar por ser como eres. De todas formas, a veces, tan sólo a veces, la inercia es algo tan esencial en la vida como lo es el aire, aunque no debemos dejar que ese aire parsimonioso nos llene los pulmones hasta reventarlos... el ritmo lo marcamos nosotros, sólo nosotros.

Ada dijo...

Está claro que dentro de ti hay mucho que mostrar y me alegra que iniciaras este viaje con algo tan bonito como lo que escribiste en nuestro blog. ¡Creo que Bea y yo nos sentimos tus madrinas! Apadrinamos todas las andazas que recorras a partir de ahora desde tu corazón. Desde entonces ya noté algo y ese algo es lo que estas creando. Al otro lado estaré leyéndote y escuchándote.
Un besazo gordo.
Bk

clementine-amelie dijo...

hummm! delicioso descubrir (-te) lo que naufraga en tu cabecita...
no dejes de descubrir las pequeñas y milagrosas maravillas de la vida en la inercia cotidiana, tampoco dejes de navegar por tu cama.

aquí me quedo, espectadora silenciosa de cada una de tus palabras.
enorme abrazo
clementine